Este post estaba archivado, pero gracias al auge del entrenamiento en casa gracias a la pandemia, decidí darle una repasada para publicarlo. De hecho, incluso vi varios debates en Internet entre quienes estaban a favor y en contra de entrenar en casa. Estos últimos, con las restricciones de la pandemia, lo llamaron una moda temporal. Y en cierto sentido tenían razón. Por otro lado, los que defienden la idea de entrenar en casa, también tenían sus puntos. El hecho es que con la vuelta a la normalidad, es probable que haya gente que aún no se decida si volver al gimnasio o continuar en casa.

Desde que me puse en campaña para mantenerme saludable, ya muchos años atrás. Comencé entrenando en casa, al principio mi única herramienta era el suelo: sentadillas, abdominales y flexiones de brazos. Mi primer gran logro fue hacer el reto de las 100 flexiones de brazos.

Pero pronto me aburrí de este entrenamiento tan monótono.

Afortunadamente, alguien del edificio donde vivía vendía un set de una barra con 25kgs en discos. Comencé a usarla y practicar nuevos ejercicios. Pasé por varias rutinas hasta la que sigo actualmente, y estoy muy feliz con ella. Pero no todo es miel sobre hojuelas con entrenar en casa. Acá listo lo bueno y lo malo desde mi punto de vista:

A favor de entrenar en casa

• Costos. No se necesitan máquinas caras para hacer ejercicio. Se puede utilizar el mismo peso corporal como resistencia. Aunque claro, por preferencias personales, yo mismo fui adquiriendo equipo para añadir variedad a mi entrenamiento. Recuerda también que a los gimnasios les conviene que pagues la matrícula anual, pero que al mes desistas de ir.
• Tiempo. Te ahorrarás tiempo en logística. También porque no tendrás que esperar tu turno para hacer press de banca.
• Música. Entrena con la música que quieras, o si prefieres escuchar podcasts. Incluso, si prefieres entrenar sin ningún tipo de música.
• Higiene: No tendrás que lidiar con sudor, olores o secreciones ajenas. Tampoco virus que se transmitan vía aérea o incluso hongos que pudiera haber en las duchas.
• Mantenimiento. No es de extrañar que gran parte de las máquinas de un gimnasio tengan un mantenimiento pobre. Bicicletas estáticas con problemas, o tener que calibrarlas cada vez a tu edad/peso/género, etc para que el cálculo de calorías sea realista.
• Dealers. La ausencia de tipos intentando venderte alguna droga para mejorar el rendimiento.
• Gente desagradable. No la hay.
• Orden. Depende completamente de ti dónde dejas los implementos luego de usarlos.
• Costumbre. Usarás los mismos implementos cada vez, y ya estás familiarizado con ellos. Tu barra favorita estará siempre disponible.
• Reglas. Las pones tu mismo. ¿Quieres usar magnesio?¿quieres gruñir al levantar? todo está permitido si así lo dispones.
• Temperatura. En un gimnasio no controlas el aire acondicionado.
• Temor al qué dirán. Si estás comenzando, o si no estás en la mejor forma física. Es probable de que te sientas observado en un gimnasio, en casa si te da la gana puedes entrenar solamente con ropa interior.
• Entrenar Descalzo. De a poco le he tomado gusto a entrenar descalzo. Cosa que no podría hacer en un gimnasio.
• Levantamiento de ego. En casa no sentirás el impulso de impresionar a nadie levantando algo que en realidad no puedes. Evitarás lesiones si comienzas liviano y progresas lentamente.

En contra de entrenar en casa

• Espacio. Si eres (como yo) de los que prefiere entrenar con implementos, necesitarás espacio para ellos. Ya sea algo tan pequeño como una pesa rusa (kettlebell) como algo más grande como un power rack, una trotadora o una máquina de remo.
• Costos. Como ves, esto puede ser a favor o en contra. Por ejemplo, si quieres comprar una bogadora o máquina de remo, hay unas que son carísimas. Lo mismo con bicicletas estáticas con cada vez más tecnología añadida.
• Contexto mental y/o distracciones. Entrar a un gimnasio puede hacer que cambies tu mentalidad, enfocarte al 100%. En cambio, entrenar en casa el "switch" debe ser mental, algo interno. Lo mismo, si no vives solo, puede ser que quienes viven contigo no entiendan que ese tiempo de entrenamiento requiere concentración y la exclusividad de tu atención.
• Constancia: Similar al anterior, hay que ser capaz de convertir la motivación inicial en disciplina para seguir una rutina y no abandonarla. Dependiendo de tu personalidad, podría ser más fácil mantener esta constancia si tienes una membresía a un gimnasio.
• Vida social. Yo prefiero la soledad, pero hay quienes prefieren entrenar con amigos, hacer una vida social en el gimnasio. Además, a veces estos amigos pueden ayudarte a ejecutar ciertos ejercicios con mayor seguridad: p.ej. que te ayuden con la barra cuando ya no puedes moverla.
• Seguridad. Hay ejercicios que son riesgosos y requieren de alguien que te acompañe. De todas formas existen alternativas o mecanismos de seguridad, como limitar el rango de la barra con un tope en caso de que no puedas levantarla en press de banca o en sentadillas.
• Variedad: Dependiendo del gimnasio, tendrás acceso a una gran variedad de máquinas e implementos para que puedas añadir variedad a tu entrenamiento.
• Coaching. Acceso a gente que pueda corregir tu técnica, o que te ayude a diseñar una rutina a la medida.
• Vecinos. Si vives en un departamento, es probable que tengas vecinos que hasta se molesten por el ruido que haces al saltar la cuerda (comba).

Al final, como ves, la decisión es personal, ya que lo que para algunos sea algo en contra, para otros puede ser a favor. Como el tema de la vida social en el gimnasio.

En el caso de los costos, cosa que he mencionado tanto en los pros, como en los contras, ya que también hay decisiones personales que podrían dejarlo en uno u otro lado. En mi caso, he comprado equipamiento usado, o incluso tengo implementos que fabricó mi padre o yo mismo.

Falta además mencionar que existen implementos de entrenamiento de calistenia gratuitos (en realidad ya los has pagado con impuestos) en muchos parques públicos. Acá la lista de pros y contras puede variar, por ejemplo, cuánto afecta el clima a que puedas mantener tu constancia en el entrenamiento. Si sufres de alergia primaveral, o incluso si el barrio donde está el parque es seguro o no a la hora en que entrenes.