Mucho se ha hablado del día de la mujer, orígenes, de celebrarlo o no. A quién celebrar o a quién no, etc.

Pero aprovecho de recordar que en Chile hace años existe un Ministerio de la Mujer, y aún así la violencia hacia ellas sigue aumentando, los asesinatos a mujeres (mal llamados femicidios o feminicidios) no han disminuido. Tal ministerio solamente sirve para poner en el poder a compañeras de ideología, de darle trabajo a quienes no tendrían posibilidad de ejercer en el mercado porque no ofrecen valor agregado con su actividad, como las especialistas en estudios de género.

¿Marchan las mujeres por cargos de alto riesgo que típicamente ejercen los hombres? no, por cuotas de género en altas esferas del poder.

¿Les importa que esas cuotas de género las perjudiquen al largo plazo, tal como #metoo las perjudicó a la hora de buscar trabajo? no, ninguna capacidad de responsabilidad.

¿Les molesta que juezas feministas liberen a violadores que luego reinciden? no, porque las víctimas sirven para seguir marchando, y seguir obteniendo dinero para su causa.

A propósito de las caletas con perspectiva de género, inauguradas hace poco, y que causaron mucha risa entre las redes sociales.

Por mucho que fuera un anuncio ridículo; no son solamente baños para mujeres en las caletas. Por detrás esconde muchos pitutos (trabajos a amigotes) para gente que adhiere a la ideología del actual gobierno. Porque nadie con sentido común adhiere a estas ideas (por eso tal alboroto en las redes sociales). Pero la que sí, tendrá trabajo gracias a Boric. A costa del bolsillo de la gente que se reía en las redes (vía impuestos).

Pero el peligro va más allá, porque las futuras licitaciones obligarán a tener ese tipo de "expertos" y con "experiencia comprobable". Experiencia comprobable en algo que no existe. Es obvio que solamente será contratada gente de ese sector político que adhiere a esas estupideces.

Cuando en mi empresa contraten a una especialista en perspectiva de género para poder ganar licitaciones en proyectos del sector público, no me sorprendería. Es más, es muy probable que vía leyes liberticidas, obliguen a todo el sector privado a contratar a gente de esa calaña.

Cuando eso suceda, todo hombre tendrá que tener cuidado, porque cada gesto, cada opinión podría ser considerada un ataque o discurso de odio.