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      Father John Misty - Off-Key in Hamburg

      Vladimir · Monday, 22 June, 2020 - 06:02 edit · 6 minutes

    Antes de empezar este comentario sobre el disco Off-Key in Hamburg de Father John Misty (un proyecto de Josh Tillman) debo aclarar dos cosas:

    1. Este disco ha salido apenas hace unas semanas y sus ganancias serán donadas para apoyar a músicos y a los afectados en la industria musical por la pandemia del coronavirus. Es una buena manera de apoyar a un sector tan vital y que necesitamos de vuelta, si les gusta el artista seguro ya han apoyado, si no quizá pueda darles una razón para oírlo, o recomendarlo a un conocido cuyo gusto sea parecido a este sonido.

    2. Me acerqué a este disco desde el desconocimiento del artista, de su público y de su trayectoria. Quizá tras esta reseña siga en una inmensa ignorancia de los mismos aspectos, pero léase como "la guía de un completo ignorante al dicos Off-key in Hamburg de Father John Misty", no será para nada un éxito editorial.

    ¿Porqué acercarse a un artista nuevo y a un género al que no se está acostumbrado? La primera razón es quizá aquel lugar común de la zona de confort. Una zona de confort es un lugar agradable y tranquilo, pero árido, en el que nunca crecerá nada.

    Saliendo de esa zona de confort me dirigí por los caminos de lo que siempre me parecerá mal llamado folk, pues no es claro lo que designa, una música hecha con elementos sencillos como la voz y una guitarra, o cercana a las raíces. En el caso de Father John Misty no está cerca de ninguna de esas categorías. Es claro que Josh Tillman compone los temas en un ambiente muy personal, quizá en su cabaña de madera, con su guitarra y su voz que tiene una clara influencia de los cantautores estadounidenses (no mencionaré nombre alguno para evitar la vergüenza de mostrar más mi ignorancia).

    En vivo lo que podemos escuchar son temas muy bien orquestados, con los acentos justos en los sentimientos, haciendo de la música y la voz una sensación que se mete por debajo de la ropa y llega a erizar la piel. Pasar de lo que aparenta ser un cantautor con su guitarra de palo (como diría Rockdrigo González) a lo que suena como un concierto masivo y un disco muy expresivo requiere de la labor de varias personas. Es claro que Josh Tillman conoce los beneficios de la industria musical con su entramado de grabaciones y conciertos, y sabe que atrás de la estrella está un trabajo monumental, no sólo técnico, también creativo.

    Ahora, con respecto a las letras puedo hacer un comentario más largo. Alguna vez un profesor me dijo que sufrir, andar de nostálgico son sentimientos que causan adicción, como lo puede ser el máximo placer (aquí pueden poner de fondo "A bigger papper bag" de este disco e imaginar que tengo el diálogo con Josh). El sentimiento que las letras desbordan es la tristeza, que debemos aclarar no es que el cantante se tire al suelo para que lo levantemos (como diría Francisco Barrios "el Mastuerzo"), esa tristeza tiene un constante juego de equilibrio, como sube y baja, con la musicalización e incluso los términos utilizados para expresarse. Podríamos pensar que un cantante que lleva varios discos triste más que necesitar expresarse necesita unos buenos consejos, no creo sea el caso de Father John Misty, pues por la música y las alegorías verbales parece disfrutar de la expresión de la tristeza, quizá en tono sanador la simple verbalización de la tristeza la hace desaparecer.

    Hay temas como "Chateau Lobby #4 (In C For Two Virgins)" donde canta con tristeza lo que me parece ser un momento de felicidad, una primera relación sexual. Y es donde uno puede vislumbrar la dualidad de la música y la mayor complejidad de la vida, aún los momentos de gozo y felicidad pueden llegar a dejar un sabor amargo. Y de esta forma, el sabor amargo de esta música puede, a la inversa, llevar a un momento de alegría y gozo.

    Pasemos a "The Night Josh Tillman Came To Our Apt." para hablar de lo claramente autoreferencial de la música. A manera de broma se refiere a él en tercera persona en el título para en la canción describir un momento, a mi parecer, vivido por él. No se preocupen, no le he quitado la magia a la letra, pues ya de ustedes dependerá decir cuál de los dos personajes era Josh Tillman, o más aún, con cuál de los dos personajes de la historia nos estamos identificando.

    Con diversas referencias a la muerte, un marcado rechazo a la religión (¡cuidado! aquí vuelve a caer en esa dualidad sufrimiento-gozo ahora traducida a amor-odio, pongan "Hollywood Forever Cemetery Sings"), el desenfado de las letras nos llegan a hablar de episodios psicóticos de la vida del artista ("Mr. Tillman"), de la tragedia que puede coexistir con el gozo futuro de una relación que nos imaginamos de apenas ver la sonrisa de una persona en la tienda (o la fila de las tortillas, como un clásico de la música romántica mexicana, "I Went To The Store One Day"), la vacuidad del entretenimiento pero lo felices que nos hace ("Total Entertainment Forever") y muchos temas más que en el argot popular mexicano diríamos "bien azotados".

    No hay que abusar del consumo de la tristeza, ni pensar que un humor nostálgico nos garantizará puros momentos lúcidos. Pero para eso momentos ambiguos, entre la tristeza y la soledad, y la felicidad y plenitud este disco puede ser un buen compañero. Entonces permitan que ahora tome yo la batuta de los temas personales y contarles como imaginaría yo la escucha de este disco (esto es completamente personal, ustedes pueden adecuar la experiencia):

    Busquen una vialidad de su ciudad (de forma imaginaria si siguen en cuarentena, una vez que pasen estos difíciles momentos podemos implementar la experiencia) muy transitada de lunes a viernes, una área de oficinas o comercial, pero que en fin de semana, sobre todo el domingo, no abra esos negocios. Que no falten las casas, sería bueno de vez en cuando ver una ventana que deje asomar episodios cotidianos de un domingo tranquilo. Entonces nos situamos en un domingo después de comer, en el momento que la mayor parte de la gente reposa sus alimentos, ponen estas canciones en su reproductor personal, si quieren hasta en una bocinita que no suene tan fuerte, o simplemente tóquenlas en su memoria. Caminen por esas calles semi-desiertas, solos o con alguien de mucha confianza, dejen que la música los lleve un poco, sientan la tristeza de ese domingo por la tarde, pero vivan la ilusión de que hay cosas que a pesar de ese movimiento de los días y las horas pueden quedarse como un momento gozoso. Dejen que la orquestación los eleve un poco (no dejen de poner atención al camino, no falta el que gusta de manejar su auto como bólido en las vialidades casi desiertas), sientan el Sol bañando un poco. Y finalmente no se dejen llevar tanto por la nostalgia, dosifiquen muy bien esta música. Y quizá no deban mezclarla con una honda tristeza, no sin la supervisión de un amigx.

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      "2 minutos punkeando para vos"

      Vladimir · Sunday, 14 June, 2020 - 17:29 · 5 minutes

    2 minutos es una ya legendaria banda punk de Buenos Aires, para ser específicos del barrio de Valentín Alsina en Lanús. Una banda de chavales que se han mantenido chavales por más de treinta años.

    Sus temas incluyen su identidad barrial, de forma directa en la misma mención e indirecta en los términos usados, los temas desenfadados de amor (que pueden sonar muy juveniles) no sin dejar de tocar temas relacionados a la sociedad que los vio florecer. Los problemas con la policía, un poco de vicio, los amigos presos. De destacar es "Amor suicida", que cuenta la historia de una chica que llora en el parque pues su novio murió en la guerra de las Malvinas. Puede parecer que se toca apenas de forma tangencial el tema, pero me parece emblemática de esta banda, del gusto argentino por el rock y su relación con la sociedad.

    En una época de nacionalismo exacerbado, durante la dictadura militar y en específico la Guerra de las Malvinas, el rock era un tema social. Sin lugar a dudas la influencia musical en este género viene primordialmente de los países de habla inglesa, Estados Unidos e Inglaterra. Sin embargo en Argentina en lugar de volcarse más a los géneros populares con más influencia nacional (el folklore como se llama, aunque no sé si sea un término que explique el estilo de música ni su origen), desarrollan bandas nacionales, con una clara influencia de bandas estadounidenses e inglesas. Llegando a tener identidades barriales como lxs "rolingas", jovenes de barrios populares que visten y escuchan a los Rolling Stones y bandas similares de la argentina.

    De cierta forma la intención oficialista resulta un tiro por la culata, pues como lo muestran lxs "rolingas", escuchar música en inglés era estar en contra de la ideolgía que trata de difundir la dictadura.

    De manera similar pueden identificarse a lxs "ramoningas", jóvenes que visten y escuchan música de e inspirada en los Ramones. 2 minutos podría encontrase en ese catálogo, pero incluso va más allá. Su estilo musical parte de la sencillez del ritmo similar al cuarteto neoyorquino, del origen popular y el contacto con una realidad no tan favorecida. Pero 2 minutos aparece casi diez años después de los Ramones, en este periodo ya llegó a oídos de la mayor parte del mundo el hardcore, un derivado del punk más fuerte y agresivo, ya The Clash, Crass e incluso bandas latinoamericanas exploraron las vertientes más políticas del género, e incluso se inicia a vislumbrar una parte más melódica del género, que eventualmente derivará en el grunge y en el boom del punk rock y punk pop de los noventas.

    En momentos 2 minutos suena con más furia y poder parecido al hardcore, por lapsos suena al género romántico en versión punk, a la velocidad y desenfado del punk relacionado a las patinetas. Pero sobre todo suena a barrios argentinos, dando ánimos a sus habitantes que aunque viven una realidad de violencia policial y pocas oportunidades, aún pueden confiar en la amistad y el amor (que podemos alejar del amor romántico).

    ¿Los temas son sólo para jóvenes o viejxs nostálgicos? Recientemente escuché un comentario de la época sin precedentes en la que vivimos, donde los adultos jóvenes no están dedicándose a construir un patrimonio y seguir los dictados sociales de "ser un adulto". Ahora hay numerosos adultos jóvenes que siguen yendo a conciertos, comprando y jugando videojuegos, yendo a bailes y fiestas que quizá nuestros padres y abuelxs consideraban sólo para gente joven sin mayores preocupaciones.

    ¿Es que los jóvenes adultos han perdido la esperanza de una estabilidad, que las reglas sociales se han flexibilizado, o que los conciertos y el entretenimiento en general ha alcanzado tal precio que es sólo para gente con trabajos más o menos estables? No lo sé, pero lo que defenderé es que la expresión vital del punk y del rock ha evolucionado de tal forma que ya no sólo habla de las cuestiones juveniles, como lo muestra 2 minutos tiene una capacidad narrativa para contarnos, casi a manera de corrido, lo que pasas en nuestra sociedad. Pero además, como lo muestran en "Canción para mi muerte" pueden tratar los temas más personales que van más allá de la edad y la identidad barrial.

    Esperemos en un futuro ver bandas de punk formadas por adultos mayores (si consideramos que algunas de las más antiguas bandas de punk siguen tocando, no estamos lejos), pero no sólo porque llevan años tocando, si no porque lo vean como una opción para expresar sus historias, sus problemas o simplemente transmitir un poco de energía.

    Este concierto data del 2009, ya hace más de 10 años. La banda pasaba de la celebración de sus 20 años en activo, y podemos ver que aún desbordan energía, como digo, siguen siendo unos chavales un poco penosos para dirigirse al público cuando no cantan o tocan, pero al iniciar la música se desenvuelven como si la comunicación fuera directa con cada una de las personas del público. Es tanta l energía que se distingue un golpe en la nariz de Mosca, el vocalista, aunque no distingo la razón de ello.Sin dejar de lado las posturas al estilo Ramone los músicos mantienen un machacante y constante ritmo, acompañando a las historias en voz de Mosca.

    El cierre es emblemático, como penúltimo tema la canción con la que al menos yo los conocí, "Ya no sos igual", donde platican la historia de un amigo del barrio que se volvió policía, ganándose el descrédito de sus amigos. Y como despedida cantan "2 minutos punkenado para vos" a coro con invitados de la banda que tocaron en el mismo escenario. Toda una celebración.

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      Reseña "La Duda/Doubt"

      Vladimir · Monday, 8 June, 2020 - 02:31 · 4 minutes

    "La Duda" es una película de 2008, dirigida y escrita (adaptada de la obra de teatro también escrita) por John Patrick Shanley, los papeles principales de Meryl Streep como la hermana Beauvier, Philip Seymour Hoffman como el padre Flynn y Amy Adams como la hermana James.

    En un colegio católico de los Estados Unidos en los años sesentas el padre Flynn es la cabeza moral del colegio, aunque es una asignatura que se le da por ser el párroco principal de la congregación. La hermana Beauvier es la directora académica del colegio y la hermana James es una de las jóvenes maestras. El padre Flynn llega a la congregación con ideas progresistas que se enfrentan a la dura disciplina y tradicionalismo con que maneja la escuela, y al parecer su vida, la hermana Beauvier. En medio de esta tensión la hermana James detecta un trato especial hacia un estudiante afroamericano del colegio por parte del padre Flynn, que da pie a malas interpretaciones.

    Siendo un tema que lleva bastante tiempo en la luz pública en países con comunidad católica, el abuso a menores por parte de religiosos, en esta película el tema flota como una duda constante que deja ver el proceder de los colegios, las asociaciones religiosas e incluso los padres de familia ante el tema. Además es la excusa para confrontar las ideas progresistas frente a la tradición más férrea de la religión, sin que ello quiera decir que se evitan los abusos de ambos lados.

    La hermana Beauvier controla con el terror a los rebeldes jóvenes en edad escolar, entra a mitad de la clases a revisar la correcta disciplina y a su vez para controlar a las maestras, manteniéndolas en un permanente estado de terror ante su presencia. El padre Flynn por su parte representa a un hombre desenfadado y que trata de ser cercano a los alumnos, sobre todo a los varones, sin dejar de lado su autoridad. El colegio permite la entrada de jóvenes de bajos recursos para mostrar su apoyo, en el curso de la hermana James está Donald Miller, joven afroamericano al que sus compañeros muestran rechazo y al cual el padre Flynn protege y mantiene a su lado.

    Por encima de este problema también vemos el enfrentamiento de dos estructuras jerárquicas comunes a casi todas las sociedades: la religión y la escuela. La actitud severa de la hermana Beauvier en algún punto es la semilla para que esa actitud se repita aún en las maestras/hermanas más jóvenes e idealistas, de la misma manera podemos imaginarnos que estas estructuras jerárquicas y que rayan en el abuso se repiten a manera de un fractal entre los estudiantes, donde unos abusan de otros. Esto último no queda tan claro en la película, aunque existe el temor constante del pésimo trato que se le dará al alumno afroamericano sin la protección del padre Flynn.

    Un personaje interesante es la hermana James, quien vive en un estado permanente de miedo entre la hermana James y las expectativas que se tienen de ella, así como de su vocación para la educación. Siendo ella quien nota la inusual relación del padre Flynn y el joven Miller busca la respuesta y solución más directa, sin cuestionar a sus superiores, llegando al punto en que sus nervios empiezan a quebrarse en clase y los niños son quienes pagan por ello.

    La hermana Beauvier tiene la intención de hacer más simple su mundo siguiendo al pie de la letra las reglas, ella teniendo claro cómo debe proceder ante el problema se encuentra con un duro obstáculo al consultar a la madre del joven Miller. En este punto la visión progresista del padre Flynn, el tradicionalismo de la hermana Beauvier chocan con la dura realidad social de un padre aún más duro que la severidad religiosa, de nueva cuenta como la jerarquía del hombre de la casa y de la visión de la masculinidad, que parece ser una tradición mucho más fuerte y violenta que la de la escuela y la religión, con sus puntos de contacto.

    Aunque la hermana James parece ser la más débil y la que sufre entre estructuras de autoridad, la hermana Beauvier es quien al final cae en una duda inmensa de su proceder, si en verdad esta férrea disciplina tiene alguna finalidad cuando hay una estructura jerárquica que raya en el totalitarismo. Ella se muestra dura pero no deja de ser empática con sus hermanas.

    Yo me aventuraré a decir que la crisis de la hermana Beauvier es debida a darse cuenta que ella era parte de una estructura de abuso y poder que va más allá de las reglas escritas en piedra. Sin importar que el padre tenga ideas progresistas o no, sigue ejerciendo el poder por encima de ella, una monja. Para lograr hacer lo correcto rompe una de las reglas escritas en piedra en las que ella confiaba, pero además de ello no logra vislumbrar que existe una mejora. El joven Miller es el centro de la batalla entre este poder violento de la iglesia, la escuela y la masculinidad, pero quizá no logre salvarse.

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      Reseña "Los Esquizitos en canal once"

      Vladimir · Sunday, 31 May, 2020 - 19:07 · 3 minutes

    La historia de los esquizitos inicia en los años noventas, relacionados con dos de los apoyos del rock en esa época: una tienda de discos y un programa de radio. Como es claro en su música, los Esquizitos son grandes melómanos, ejerciendo un género que quizá su dos mayores característica sean su amplitud y la dificultad de definirlo: el garage.

    En palabras de Sergio Monsalvo "un rock al que es imposible imitar por quienes no comparten el espíritu del género", el garage es un subgénero del rock que cruza desde el rock and roll de los cincuentas, pasando por el rock clásico de los sesentas, el punk, la psicodelia hasta llegar al grunge. Esto parece una paradoja, pues es un género que casi engloba a todo el rock, incluyendo a expresiones tan disímiles como el punk y la psicodelia con tintes progresivos (que en los años setentas se suponían antagonistas).

    El nombre de garage se le dio por considerarse rock hecho en los garages de los jóvenes, bandas de amigos con el deseo de divertirse. Término muy poco apropiado dada su dispersión por el mundo, viendo el caso de México es raro el que tenga un garage a disposicón en el que pueda meter los instrumentos, quizá sería más cercana una bodega o una azotea. Desconozco cuál sería el lugar de ensayo de Brisa, Nacho, WIlly y Alex, los Esquizitos, pero en definitiva no nacieron como una banda que ensayaba en un estudio o que hasta rentaba su propia sala de ensayo.

    La presentación en video sucedió en el año 2018 en el canal público de la ciudad de México, partes del concierto que se ve en este video son usadas para el especial musical, que incluye entrevista y testimonios. La banda ya tiene una extensa trayectoria y continúa activa, sus integrantes ya pintan algunas canas, en el caso del Tío Alex sus hijos ya están en edad adolescente. Aún así tocan este género supuestamente asociado a jóvenes.

    Lo que podemos distinguir del concierto es que la música tiene una fuerte base rítmica, las grandes florituras de todos los instrumentos brillan por su ausencia, pero en conjunto suenan con un ritmo estable, potente y dinámico. El acompañamiento de la voz es aparentemente una excusa para continuar la diversión, en conjunto hace parecer que es un género fácil; citando de nuevo a Sergio Monsalvo "disponible no es sinónimo de fácil". A pesar de ser claras las influencias, incluso mencionadas, de los Cramps, Talking Heads, Ramonnes, Misfits, Man or Astro-man?, The Gun Club, no son una simple adaptación al "mexicano" de esas bandas (al estilo hermanos Carrión), en mi opinión hay un trabajo de apropiación y análisis de estos ingredientes. No rayan en el hipersexualismo de los Cramps y la adoración de la cultura popular de consumo occidental de algunas canciones de los Ramonnes y Misfits, llegan a ser una banda que bien puede disfrutarse a cualquier edad (en el mismo público se distingue la diversidad de edades), adaptan las cacarterísticas del garage a la realidad mexicana, entre luchadores, lanchas emparentadas con peceros y microbuses en el puerto de Acapulco o el destino playero turístico de su preferencia, historias de novela negra y mucho humor.

    La misma diversión de la música debe ser lo que los mantiene unidos y en activo, su influencia a futuro es clara: Nacho y Willie por un momento participaron a la par en Lost Acapulco, otro de los pilares del rock de garage en su vertiente surf. En la ciudad de México e incluso otros estados de la geografía mexicana el garage tien presencia, el grage revival, el surf y el punk Ramonne entre los más exitosos. Pocas veces es posible escuchar a una banda que sirva de semilla a tal variedad, e incluso más dificil que siga en activo, tenemos la fortuna de que los Esquizitos siguen tan vivos e influyentes como al inicio.

    Hay dos de sus características que me gustaría ver más en las bandas de garage actuales: su inclusión, ya que evitan la hipersexualisación que en algunas bandas raya en el machismo, incluso evitando la agresión en escena, y por otro lado sus roces con el blues más ruidoso y grasoso. El blues también cuanta con una larga tradición en México, sería muy interesante ver el diálogo de estas dos músicas que se han establecido en el gusto popular mexicano.

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      Reseña "The Gift / La Premonición"

      Vladimir · Sunday, 24 May, 2020 - 19:09 · 6 minutes

    Sam Reimi es un director que conozco por dos extremos de películas, uno de los pilares del cine gore y como iniciador del boom de las películas sobre súper héroes en los años dos mil. En ambos casos (Evil Dead y la primera trilogía de Spiderman) se diluye su influencia tras la idea de la comicidad, vista a la distancia. Idea que el director acepta con buen humor y que incluso en algunos casos lo alimenta (recientemente dirigió una serie cómica y de acción que continúa su clásico Evil Dead).

    The Gift, del año 2000, estelarizada por Cate Blanchete en el papel de Annie Wilson, una joven viuda con tres hijos que vive de la pensión que le dejó su recientemente fallecido esposo y se ayuda con las donaciones que recibe por sus donde psíquicos (de aquí el título de la película The Gift, que se traduce al don, aunque la titularon La Premonición en español). En este caso Sam Reimi no da una de los pilares del género (un año antes apareció el sexto sentido y cuatro años antes apareció la joya de Peter Jackson, The Frighteners \ Muertos de miedo), pero muestra que una cinta del género puede tener profundidad y ser un buen transporte para una historia que dé más a la discusión.

    Annie Wilson es una mujer popular en su pequeño poblado de nombre Brixton, aparentemente situado en la región pantanosa al sur de Estados Unidos (una consulta posterior descubro que es Georgia), por sus dones psíquicos, lee las cartas a las personas que confían en ella. A pesar de ejercer lo que algunos de sus vecinos despectivamente llaman la adivinación, es una mujer consciente de su lugar en la comunidad como consejera. No deja de recomendar visitar a un médico, acudir con un abogado, o simplemente hablar como amigos. En la comunidad sucede un crimen y la señora Wilson se ve relacionada con los terribles hechos.

    La película fue escrita por Billy Bob Thornton y Tom Epperson, basado en las supuestas experiencias psíquicas de la madre del primero.

    La Sra. Wilson tiene el mismo conflicto que la sociedad tiene con ella, en el mundo moderno el lugar de una psíquica se centra más en el juego, un juego que reviste ambivalencia, ante la sociedad el total descrédito a la práctica, en lo interior dejar abierta la posibilidad a lo incomprensible en caso de ser necesario. Como cuenta en una anécdota el filósofo Slavoj Zizek sobre un profesor universitario que tiene una herradura de la suerte colgada encima de la puerta de su casa; cuando un colega lo visita le pregunta el porque de esa herradura, si acaso cree en esas supercherías, el profesor responde que por supuesto que no cree en esas tonterías, pero la gente que sí cree le ha dicho que funciona incluso si no cree en ello.

    Por ese mismo conflicto interno y externo la Sra. Wilson no logra llevar con su familia el luto a su difunto esposo. Tras el suceso del crimen y la petición de ayuda por los familiares es la sociedad en general la que empieza a hacer burla de ella. Uno de los personajes que mejor ejemplifica el conflicto es el Sr. Barksdale, un esposo golpeador, sureño agresivo que el prejuicio suele llamara redneck. Ante la idea de que se entromete en su matrimonio va a amenazar a la psíquica, tachándola de bruja, defendiéndose en su catolicismo (o cristiandad, quizá sea una región protestante); pero en su momento va a amenazarla con un muñeco vudú como represalia al daño que supone le hace a su matrimonio.

    La película va un poco más allá del thriller supernatural, popular en la época con otras películas anteriores y posteriores e incluso series. Es un vistazo al sur orgánico y con mezcla de tradiciones y modernidad de los Estados Unidos, una región marcada por las ideas del vudú, los prejuicios hacia su población que los tacha de ignorantes y fanáticos (rednecks), pero que no dejan de ser parte de la nación que por años promovió la noción del mundo occidental moderno, alejado de las creencias sobrenaturales, cercano a lo racional, pero como lo muestra la película, sólo en ocasiones dado a ver lo que escapa a la razón.

    En toda su historia las grandes casas productoras de cine estadounidense han volteado a las tradiciones del resto del mundo, a veces de buena manera, otras tantas de forma muy grosera y colonialista, pero pocas veces vemos la multitud de culturas dentro de uno de los países más grandes del mundo. Por la experiencia como país cercano y no tan desarrollado, sabemos que su cultura suele estar a favor de hacer todo homogéneo. La imagen de los vaqueros tratando de anexar a la modernidad a los nativos americanos, donde esa modernidad es ser como ellos, creer en su religión y seguir su estilo de vida, a pesar de que ellos también están plagados de ideas que van más allá de lo que se considera racional, aún pervive en la incursiones militares que durante el siglo veinte y principios del veintiuno llevaron acabo los poderes político militares de Estados Unidos.

    Hoy en día en este país hay una crisis severa, ante la falta de oportunidades de esa misma comunidad que en el imaginario colectivo eran los que gozaban del "país de las libertades". Falta de empleo, graves pandemias de drogadicción aunado a la terrible situación de salud actual y el deficiente sistema de salud, que no está al alcance de todos, dejan la pregunta en el aire de porqué las casa de cine dejaron de voltear a ver esta región de su país, tachada de ignorante y que hoy en día es la que sufre más por la crisis.

    Aquí hay una película que si voltea a ver, que muestra a una comunidad entre la magia y la modernidad, pasando en ambos lados por el prejuicio y la desconfianza. Los crímenes en la cinta, lo que podríamos identificar con la maldad, no se circunscriben en el terreno de la magia, si no en el de la violencia hacia la mujer, un latente machismo e inseguridad de los hombres. Pero no sólo del sureño supuestamente ignorante, también del profesionista supuestamente racional, de una sociedad que aún ve como débil a una viuda y desprecia a la mujer de sexualidad activa.

    Tampoco es aleccionadora en ese sentido, deja a cada uno interpretar el mal y el daño de esta sociedad, no sin mostrar que también en ese machismo y abuso de poder se agrede a hijos. Una película que vale la pena ver como muestra de los problemas que hoy sacuden a la sociedad, pero que no se generaron de manera espontánea.

    La película no deja por ello de ser entretenida y dar algo a todo el público, sea por el desfile de estrellas, incluido Keanu Reeves, el lado un tanto policiaco de la historia y las cuestiones sobrenaurales que construyen una historia más profunda de lo que se esperaría.

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      Reseña "23 segundos"

      Vladimir · Monday, 18 May, 2020 - 01:50 · 4 minutes

    En las cintas cinematográficas que he visto, con un personaje principal con algún problema de aprendizaje, siempre hay un sabor a que es una labor difícil, tanto para el cineasta como para el público. No me parece se deba a una falta de maestría en la dirección, actuación o apreciación del público, para todos como sociedad es un asunto que aún no sabemos manejar de la mejor manera. La inclusión social en gran medida será el tema de estas películas.

    "23 segundos" es un largometraje del director Dimitry Rudakov, una producción uruguaya de 2014, con la actuación principal de Hugo Piccinini como Emiliano, un joven adulto con problemas de aprendizaje, viviendo en un barrio conurbado a lado de su madre, una profesional de la salud ya retirada, dedicada al cuidado de su hijo y a paliar alguna dolencia propia que no queda clara en la película.

    Emiliano sale cada mañana a trabajar (laburar dirían en aquellas geografías) como limpiaparabrisas en los cruceros de la ciudad. Justo al inicio de la película menciona que quizá ya lo hayamos conocido en algún crucero, pero al parecer no le prestamos atención, como no se le suele prestar mucha atención a l@s jóvenes que laburan en los cruceros.

    Y al desarrollarse la trama es que distinguimos las dificultades de afrontar el tema como sociedad. Emilino es un personaje afable, buen vecino y hasta al parecer con un candor infantil. Su labor de limpiaparabrisas incluye una mitología propia que en la historia nos hace ver a Emiliano dueño y creador de su propio universo: si está en el crucero que labura y pasan tres carros rojos consecutivos, es señal de que el día será muy bueno. Si por el contrario pasan tres autos negros consecutivos, el día será terrible, y para evitar pasarla mal deja el crucero y se regresa a casa.

    Esta visión es el lado amable y quizá hasta cierto grado condescendiente del trato a las personas con capacidades diferentes, los mismos personajes de la película tratan a Emiliano como un amigo de tiempo: uno de sus clientes, sus amigos del taller mecánico, la vecina. La otra visión es la que de alguna manera esconde este trato condescendiente de las personas, se le trata con amabilidad, con familiaridad, escondiendo un miedo y desconfianza a la persona, a que en algún momento un hombre con la inocencia de un niño deje ver su ira o su deseo. Estos son dos lados del prejuicio que en la película dialogan.

    Dentro de su mitología personal Emiliano se da cuenta de que un día se ha vuelto anormal, pues se despierta exactamente 23 segundos antes de que suene su alarma, misma cantidad de tiempo que le toma lavar un parabrisas. Llegando al crucero rompe una de sus reglas, ve pasar los tres autos negros y aún así se queda a limpiar el parabrisas del tercero. Justo atrás se encuentra el carro de una joven y atractiva vendedora de bienes raíces. En ese momento sucede un acto violento que obliga a Emiliano a actuar fuera de su mitología propia.

    Ante sus peticiones de ayuda se descubre un Emiliano más abiertamente preocupado y molesto, la gente antes amable y familiar le da la espalda. El mismo personaje toma la decisión de ayudar pero sacando ventaja, mostrando ese lado de supuesto infante inocente con emociones adultas. Si nos detenemos a pensarlo realmente el personaje no deja de actuar como los demás, quienes tampoco quisieron ayudarle por pensar sólo en ellos. En sus ilusiones Emiliano se percibe como una persona igual a las otras, con automóvil, una pareja, un laburo distinguido, cenas en restaurantes y amigos, cambiando los papeles donde uno de sus clientes es ahora el limpiaparabrisas tratado con condescendencia por él. Sólo en el detalle de que la fina cena son hamburguesas con papas a la francesa se distinguen los rasgos del Emiliano del día a día.

    Una de las grandes interrogantes que deja ver la película es sobre la integración a una sociedad un tanto rígida de las personas con capacidades distintas ¿porqué razón no tener acceso a otro laburo? ¿Deben considerar tener una familia como la sociedad lo pinta para una vida exitosa? Y en ese sentido ¿las persona que tienen sus familias y su laburo, realmente siguen los parámetros de una vida "normal"? La pregunta se queda abierta, el director y guionista logran cerrar en buenos términos la historia de Emiliano, pero no así la respuesta a su pregunta. Emiliano es el personaje alrededor del que se construye esta realidad, pero el centro de la narración es la inclusión, ya no sólo en la familia, en la sociedad y la idea generalizada y generalizadora.

    La película no da las respuestas, pero vale la pena para ahondar las preguntas, identificar las partes que reflejan a nuestra sociedad, sea latinoamericana o no. Emiliano, un hombre solitario camina una solitaria ciudad, hasta el final donde se reconoce como una parte de esta misma sociedad, aunque a su manera, que comete errores, pero no por ello es más o menos que el resto de las personas.

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      Reseña: Iggy Pop - Concert at Montreux Jazz Festival 03/07/18

      Vladimir · Sunday, 3 May, 2020 - 17:42 edit · 4 minutes

    El festival de jazz de Montreux es uno de los festivales musicales más importantes de Europa. Realizado cada año en Montreux, Suiza es conocido en el mundo del jazz y la música popular contemporánea por sus diversos invitados, distintos discos especiales grabados desde el festival. Pero además por su carácter amplio y abierto a la fusión diversa. Por el festival han pasado Miles Davies, Ella Fitzgerald, Led Zeppellin, Frank Zappa y muchos más.

    Por su parte Iggy Pop tiene una larga trayectoria en la rama más salvaje del rock, a finales de los sesentas lanzado a la fama con su banda The Stooges (anteriormente había participado en otras) y haciéndose un fenómeno a escala mundial con sus posteriores trabajos solistas. Digo el rock del lado más salvaje, pues es difícil definir el género musical en el que suele trabajar, yendo del rock clásico con un poco de psicodelia, el garage revival de los sonidos cincuenteros, el punk rock de los setentas a la fecha e incluso teniendo algunas baladas rock, ejemplo de ello es la penúltima canción que interpreta: "Candy".

    Al momento en que se juntan estos dos fenómenos musicales, el festival de Montreux e Iggy Pop, podemos ver las distintas capas del rock en nuestra época. Por un lado el rockero salvaje y espectacular que a sus 71 años (cumplidos a la fecha de ese concierto, recientemente ya cumplió 73) sigue dando una interpretación única, y como dice su última canción, sigue siendo un salvaje (a wild one). Por otro lado el festival más enfocado al jazz y que en sus primeros años de apertura al rock lo hacía para grupos de rock progresivo, más cercano a la improvisación jazzística y la composición con influencias de la música orquestal, en el auditorio Stravinski recibe a una multitud lista para pasar una hora y media catártica y desenfrenada.

    Iggy Pop y los músicos que lo acompañan mantienen un sonido básico de rock, dos guitarras bajo y batería, que por momentos son acompañados por un piano eléctrico (que toca uno de los guitarristas). Sin una banda gigantesca ni grandes arreglos logran un sonido vivo y frenético, suave cuando se requiere y lleno de emoción. El público salta y canta con la emoción de los músicos. No hay duda para ninguno de los asistentes y espero que ni para el público más acostumbrado al jazz en este festival y auditorio, que el rock también puede evocar gran cantidad de sentimientos y desembocar en la expresividad a la par del jazz.

    Iggy Pop no es una estrella estática del firmamento rockero, desde hace varios años tiene un programa de radio en la BBC de Londres, donde comparte sus gustos musicales de antaño y actuales, es un activo investigador musical con gusto por el jazz y gran entusiasmo por las propuestas actuales cercanas al punk, postpunk, electrónica. No es ajeno a los sonidos clásicos de este festival, y no dejan de ser una influencia para su creación musical.

    Durante el concierto se escuchan éxitos de su época con los Stooges, su era solista y su reconocido cover a The Dee Jays "Real Wild Child" que es el impresionante cierre de la presentación. A sus 71 años sigue con gran actividad en el escenario, con una ligera cojera en uno de sus pies, que no lo detiene para aventarse al público, saltar e incluso tomarse una cerveza en un momento álgido.

    Durante el concierto Iggy sufre una caída (no se ve claro en cámara si se avienta al público o tropieza) donde pierde un diente, al final del concierto entre risas le dice al público que perdió un diente, pregunta si valió la pena, el público grita que sí e Iggy se va con una sonrisa (no sin aventar un par de cosas aún por la energía del concierto). Los músicos al igual cierran con una energía desbordada, aunque durante el concierto se muestran profesionales, tranquilos pero disfrutando cada momento. El baterista cierra tocando con toda energía los platillos, ya de pie y haciendo reverencia a Iggy Pop. Todos cooperan a hacer un concierto memorable, Iggy como un timonel que fluye libremente y ellos como la base que lo eleva a cubrir todo el escenario. No deja de tener un papel importante la interpretación de los músicos que lo acompañan, dándoles su espacio para que continúen contando la historia desarrollada en la canción.

    Un concierto que a pesar de las limitaciones de verlo por video, casi dos años después, no deja de ser una gran experiencia, así no se preste atención al video (en la batería se puede notar un poco su desfase respecto al sonido, cosa que no le quita nada) la música suena tan bien como si casi estuviéramos ahí, nos hace falta los objetos que vuelan y compartir el sudor para la experiencia completa, pero seguro pueden imaginarse la sensación.

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      Reseña "Nonotak - Late Speculation (Medley version)"

      Vladimir · Sunday, 26 April, 2020 - 16:21 · 1 minute

    Un músico electrónico bromeaba en alguna ocasión sobre la utilidad de los visuales en el género, de manera desenfadad decía que era para que la gente no se aburriera de sólo ver al músico frente a la computadora, pues pensarían que se dedica a checar su facebook. Claro que era a forma de broma, los visuales junto a la música (sea electrónica o no) tienen varias finalidades, yo no puedo listarlas todas, pero en la que haré hincapié, y la primera que me viene a la mente es la de las atmósferas.

    Nonotak (también Nonotak Studio) materializan de manera directa esta idea de las atmósferas, pero además agregando el espacio sonoro. Dueto conformado por la artista visual Noemi Schipfer, y el artista y arquitecto musical Takami Nakamoto (el mismo proyecto lo nombra arquitecto musical), trabajando juntos desde 2011.

    La conjunción de ambos artistas en la obra "Late Speculation" da como resultado ambientes sonoros tridimensionales, con el sonido y la iluminación, apoyados de mamparas que los rodean, construyen edificios imaginarios, en movimiento, pero además, al agregar el sonido, le dan un sentido de habitabilidad al espacio. Una construcción etérea (que gracias al registro visual en este video podemos atestiguarlo) dentro de la que ambos artistas generan un vínculo creativo.

    Si bien los instrumentos musicales dentro de su diseño tienen impreso un valor para su presentación pública (si no se considera muy escénico un piano, sólo piense en las guitarras eléctricas dobles, o hasta en la tuba orejona), los instrumentos de la música electrónica en su fase más básica no se revisten de tanta espectacularidad, pero en esta propuesta audiovisual queda demostrado que ese valor para su presentación en público puede obtenerse de maneras más creativas.

    El valor musical no sólo recae en Takami Nakamoto, junto a Noemi Schipfer generan no sólo un habitáculo, crean experiencia musical que incluso cuesta trabajo decir si es simplemente ambiental. Hay todo un dialogo entre luz, música y espacio, con un elemento extra necesario para darle sentido a esta casa creada, el público.

    Debe ser interesante presenciar las obras de frente, pues esto además le agrega un valor extra de ritualidad.

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      Reseña "Lumiere" de Robert Henke

      Vladimir · Monday, 20 April, 2020 - 01:53 · 1 minute

    La obra de Robert Henke puede pensarse en varios niveles, en el más visible podríamos pensarlo como una instalación multimedia, donde sonido e iluminación (éste es un detalle importante, Henke trabaja en el límite de los visuales con video y la iluminación de potentes lámparas) se juntan para generar una experiencia estética a partir de recursos electrónicos un tanto austeros.

    En otro nivel la obra de Henke es un concierto musical en forma, la música parte de elementos sencillos sin dejar de tener un ritmo, hasta llegar a un clímax donde el sonido es completamente musical y las luces armonías visuales a la par.

    Quienes hayan asistido a un concierto de música popular en un gran foro, o incluso en pequeños foros culturales especializados, quizá no prestan la debida atención a la importante labor de la iluminación. Pero tras asistir a varios, o comparar un concierto en un foro pequeño, al aire libre y de día, con uno en gran escenario, ya de noche quizá alcancé a distinguir que algo falta. Henke trabaja con elementos mínimos para mostrar la íntima conexión entre luz y sonido necesaria para vivir la experiencia musical.

    Si bien la música lo único que pide de nosotros es nuestros atentos oídos, agregar el espectáculo visual es una posibilidad para agregar elementos a la obra. Sea presencia escénica de los ejecutantes o los apoyos visuales más comunes en la música electrónica, el sonido pude conectarse, más que ser apoyado, por la visión.

    En la pieza Lumiere, Robert Henke utiliza elementos lumínicos que no parecen ser video proveniente de un proyector, mas bien potentes lámparas. Imágenes similares a las obtenidas en un osciloscopio, números, letras e incluso estática, se combinan en un espectáculo escénico que parece hacer a la luz bailar.

    Robert Henke es uno de los programadores del software para producción musical Ableton Live, al final del espectáculo en las luces aparecen la frase "Love Code" en referencia la programación. Será interesante conocer un poco más del artista y de sus procesos creativos.